sábado, 27 de febrero de 2010

Hacer el amor es...


Cuando ponés la mano en su hombro, frente a la cama de tu hijo y le decis "no te preocupes, te amo".

Cuando ven salir juntos el sol, y con cada amanecer sienten renovado ese amor que nació con un "te amo".

Cuando tienen problemas económicos, los enfrentan juntos y aún en la adversidad le decis "no te preocupes, te amo".

Cuando al llegar a casa del trabajo sentis el confortable abrazo y el dulce beso de esa persona que con un "te amo" acelera tu pulso y sentis que el corazón te late mas rápido.

Cuando en la madrugada sienten la preocupación por el hijo que no ha llegado y en la cama sentis una voz que dice "no te preocupes, te amo".

Cuando van a tener un hijo y en el momento del parto sentis sus manos y su voz que te dice "te amo".

Cuando ven crecer juntos a sus hijos y a tu lado sentis la misma voz que hace años te enamoró con un "te amo".

Hacer el amor es caminar juntos en la vida, superando los obstáculos que la misma vida les pueda presentar, es crecer juntos espiritual e intelectualmente, evolucionar unidos, fortalecer los lazos en común con esos pequeños detalles que algunas veces nos parecen tontos e insignificantes, pero que sin embargo son tan importantes para evitar la rutina que es la más cruel enemiga del amor.

Cuando te sentis triste, cuando te sentis feliz, cuando te sentis deprimido, cuando te sentis enfermo, cuando te sentis en salud y siempre sentis a esa persona a tu lado, diciéndole vos, "te amo" y ella respondiendo "yo te amo mas"... en esos momentos podes decir "he hecho el amor".

Hacer el amor es llegar al final de tu vida al lado de esa persona que hace años te conquistó y que te ha hecho sentir el ser mas feliz y dichoso sobre la tierra.

<>

viernes, 26 de febrero de 2010

No somos irrompibles


Los cristales pueden quebrarse.
A veces basta un leve golpe de abanico.
Las telas suelen desgarrarse al contacto de una diminuta astilla.
Se rasgan los papeles...
Se rompen los plásticos...
Se rajan las maderas...
Hasta las paredes se agrietan, tan firmes y sólidas que parecen.

¿Y nosotros?
Ah!...Nosotros tampoco somos irrompibles.
Nuestros huesos corren el riesgo de fracturarse, nuestra piel herirse...
También nuestro corazón, aunque siga funcionando como un reloj suizo y el médico nos asegure que estamos sanos.

¡CUIDADO! ¡ FRÁGIL ! El corazón se daña muy fácilmente.
Cuando oye un "no" redondo o un "sí" desganado, una especie de "nnnnsí" y merecía un tintineante "¡Sí!"...

Cuando lo engañan...
Cuando encuentra candados donde debía encontrar puertas abiertas.
Cuando es una rueda que gira solitaria día tras día...noche tras noche...

Cuando...

Entonces, siente tirones desde arriba, por adelante, desde abajo, por detrás...o es un potrillito huérfano galopando dentro del pecho.

¿Se arruga?
¿Se encoge?
¿Se estira?
No.

Late lastimado.

¿Y cómo se cura?

Solamente el amor de otro corazón alivia sus heridas.
Solamente el amor de otro corazón las cicatriza.


Elsa Bonermann

<>

jueves, 25 de febrero de 2010

Fuerza y coraje


Es preciso tener fuerza para ser firme,

pero es preciso tener coraje para ser gentil.


Es preciso tener fuerza para defenderse,

pero es preciso tener coraje para bajar la guardia.


Es preciso tener fuerza para ganar una guerra,

pero es preciso tener coraje para rendirse.


Es preciso tener fuerza para estar en lo cierto,

pero es preciso coraje para tener duda.


Es preciso fuerza para mantenerse en forma,

pero es preciso coraje para mantenerse en pie.


Es preciso tener fuerza para sentir el dolor de un amigo,

pero es preciso coraje para sentir los propios dolores.


Es preciso tener fuerza para esconder los propios males,

pero es preciso coraje para demostrarlos.


Es preciso tener fuerza para soportar el abuso,

pero es preciso coraje para hacerlo parar.


Es preciso tener fuerza para quedarse solo,

pero es preciso tener coraje para pedir apoyo.


Es preciso tener fuerza para amar,

pero es preciso tener coraje para ser amado.


Es preciso tener fuerza para sobrevivir,

pero es preciso coraje para vivir.

<>

miércoles, 24 de febrero de 2010

Arriesgarse


* Hacer algo por alguien, es arriesgarse a involucrarse.
* Expresar sentimientos, es arriesgarse a mostrar tu verdadero yo.
* Exponer tus ideas y tus sueños, es arriesgarse a perderlos.
* Reír, es arriesgarse a parecer un tonto.
* Llorar, es arriesgarse a parecer un sentimental.
* Amar, es arriesgarse a no ser correspondido.
* Vivir, es arriesgarse a morir.
* Esperar, es arriesgarse a la desesperanza.
* Lanzarte, es arriesgarse a fallar.

Pero los riesgos deben ser tomados, porque el peligro más grande en la vida es no arriesgarse.

La persona que no arriesga, no hace, no tiene, no pretende, no anhela...

Se pueden evitar sufrimientos y preocupaciones, placeres y alegrías pero te estarías perdiendo de aprender, sentir, cambiar, crecer, amar y vivir...

SOLO UNA PERSONA QUE SE ARRIESGA ES LIBRE.

TE ARRIESGARIAS A CORRER RIESGOS?

<>

martes, 23 de febrero de 2010

Visiones de la realidad


Existen tantas visiones de la realidad como personas que la vivencian. Y esas visiones pueden ser tan diferentes que una misma circunstancia puede ser fabulosa para unos y espantosa para otros.

La realidad de un hombre depende de su ser interior y de su circunstancia. Las cosas van o vienen, de acuerdo al punto en donde estemos situados. Esto, de algún modo, significa que una parte de nuestra realidad depende de nosotros. Y es precisamente sobre esa parte donde debemos actuar.

Poco podremos, posiblemente, hacer sobre el entorno y la circunstancia. Pero sí podemos situarnos en una posición más favorable, haciendo que esos factores confluyan hacia nuestro bienestar.

No dejemos de hacer lo mejor para nosotros y para quienes nos rodean y nos quieren bien.

No aceptemos el destino así, como viene, dejando que mueva nuestra vida a su entero antojo. No. Explotemos al máximo esa porción que depende exclusivamente de nosotros.

Seguramente descubriremos una nueva realidad... Una realidad mejor... Una realidad que se ajusta a nuestra medida... Una realidad hecha, en gran parte, por nosotros, para nosotros...

Reflexión: Graciela Heger A.

<>

lunes, 22 de febrero de 2010

Elevate por encima del infortunio...


Elevate por encima del infortunio...

Siempre habrá momentos difíciles y días complicados en nuestra vida.

Nos da la impresión de que ciertas cosas simplemente no estaban destinadas a pasar y que algunos proyectos simplemente no estaban destinados a funcionar.

Siempre enfrentaremos decepciones, pero también recibiremos muchas bendiciones especiales.

Todo lo que se nos pide es que nos elevemos por encima de nuestros
infortunios.

Dejá que la vida te muestre nuevas maneras de encarar viejos problemas.
Dejá que te ofrezca nuevos descubrimientos. Dejá que los días desplieguen ante vos nuevas posibilidades que hasta entonces desconocías, nuevos sueños que nunca soñaste, y que te regale las semillas de nuevas ideas que nunca antes sembraste.

Dejá que la vida modere tus convicciones y te muestre todo lo que está oculto detrás de cada escena: la profunda paz del cambio de estaciones, la majestad de lo que significa tener y ser un amigo, la alegría que se descubre al comprender que nunca es tarde para volver a empezar.

Dejá que la vida brinde abundancia a tu alma y a tu corazón.

Dejala cantar en vos y mostrarte cómo apuntar a las estrellas.

Dejá que te ayude a alcanzar todo lo que deseás para ser todo lo que sos.

Se trata de una regla muy sencilla:
Cuanto más das, más recibís.
Y cuanto más lo hagas, más te gustará hacerlo.

Sos una persona maravillosa que merece tener una bella vida.

Y si alguna vez sobreviene la dificultad, sé que podes elevarte por encima de ella.

¿Qué es necesario para el éxito total?
PASOS CORTOS Y POSITIVOS...

<>

domingo, 21 de febrero de 2010

CAMINO A LA LIBERTAD


Libertad es la capacidad de visualizar un futuro mejor y concentrar nuestra atención, nuestra pasión y nuestras decisiones en ese futuro.

Es dominar nuestros pensamientos, sentimientos y acciones y dirigirlos correctamente.
Es poder sacrificar lo inmediato y lo cómodo por algo mayor y mejor.

Es decidir hacer lo necesario para que el futuro exista.

Libertad es crecer pero no a expensas de otro. Es crecer en paciencia, en perseverancia, en amor, en fe, en confianza, en seguridad, y en la capacidad de producir resultados a través de una vida dirigida, por uno mismo, hacia objetivos dignos.

Si la libertad de uno o de unos, produce opresión en otros, entonces no es libertad, sino un capricho egocentrista.
Este capricho lleva a irrespetar, dominar y controlar la vida de otros trayendo destrucción y violando los principios de la vida.

La libertad real produce respeto a la vida, y es regida y gobernada por principios y leyes. Es por esto, que las personas más libres son las que más se conocen y más se sujetan a producir resultados en sus vidas conforme a sus propósitos y sus razones de ser.

Entendemos hoy a los héroes, que se levantan cada día cumpliendo con sus metas, negándose a sí mismos en pro de sus propósitos, sabiendo que Dios es el protector y determinante del futuro de los que deciden vivir la libertad de ser lo que nacieron para ser.

Decisiones contundentes se están tomando en los corazones; decisiones que determinan el futuro.

Es tiempo de crear un camino nuevo hacia un futuro posible, es tiempo de saber que cada uno de nosotros puede hacer la diferencia.

La libertad sin sacrificio y esfuerzo no existe. Los errores del pasado crean el temple y el carácter necesarios para construir algo mejor. Nuestras decisiones diarias determinan ese futuro.

Si hoy decidimos respetar, amar, dar gracias y luchar por lo que creemos, mañana será diferente. Haremos tangible la verdad, la justicia y la libertad para nosotros y para una nueva generación.

Tu vida cambia en el momento que tomas una decisión integra, acorde y comprometida. La fuerza y el poder de una decisión y de sus consecuencias residen dentro de ti.

En otras palabras, ya la posees. Cuando decides lo que quieres encontrarás un camino, estarás determinando el éxito de tu decisión.

Tomar una decisión es comprometerte con el resultado, sin vacilación, sin pensar en otra posibilidad. Mientras más tomas decisiones, más habilidad tendrás en tomar decisiones acertadas. La repetición conduce a la habilidad: sé consistente y perseverante con tu decisión.


Alison Salas

<>