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martes, 29 de septiembre de 2009
El cerebro humano.
El Cerebro es el órgano más complicado del cuerpo humano, con 30 billones de células, llamadas neuronas. Cada una de ellas es como una computadora en miniatura, pero mucho más perfecta que cualquier computadora conocida hoy día... tienen unas 100.000.000.000.000 conexiones entre ellas, esto es mucho más que el número de estrellas que se estima haya en la Vía Láctea, y equivale en la computadora a unos 20 millones de libros de 500 páginas cada uno, o sea la suma de todos los textos contenidos actualmente en todas las bibliotecas de la tierra!...
La primera pregunta que me surge, después de leer esta descripción, que aún cuando es muy impresionante, no nos dice lo que realmente es el cerebro, ya que sigue siendo uno de los órganos más desconocidos para los científicos, me nace la pregunta ¿puede alguien honestamente creer que él, es sólo producto de la teoría del Bing Bang?
Me parece mucho más lógico creer que “el universo de universos es la obra de Dios y la morada de sus diversas criaturas. "Dios creó los cielos y formó la tierra; estableció el universo y no creó este mundo en vano; para que fuera habitado lo creó".
Son “muchas las características de la vida humana, que ofrecen abundantes pruebas, de que el fenómeno de la existencia mortal, se planeo con inteligencia y de que la evolución orgánica no es simplemente una casualidad cósmica. El establecimiento de la vida en un planeta, nunca es de carácter experimental. La evolución de la vida es una técnica eternamente progresiva, diferencial y variable, pero nunca fortuita, ni del todo experimental en el sentido casual”
“La física y la química por sí solas, no pueden explicar cómo el ser humano evolucionó a partir del protoplasma primitivo de los primeros mares. La capacidad de aprender, la memoria y la respuesta diferenciada al medio ambiente, es la provisión de la mente”
La mente es otro de los misterios que recién comienzan a profundizarse a través de la neurociencia, que trata de contestar ¿Qué son la conciencia y la mente humana? ¿Por qué experimentamos emociones? ¿Por qué aparecen las enfermedades psiquiátricas o neurológicas? Estas son algunas preguntas básicas que la neurociencia intenta contestar en beneficio de la humanidad. Se avanza, pero aun queda mucho por descubrir.
El Libro de Urantia, nos grafica la mente diciendo: “el espíritu es el arquitecto, la mente es el constructor y el cuerpo es el edificio material” pero para que el espíritu, la mente y el cuerpo cumplan sus respectivas funciones es preciso hacerlas través del cerebro.
“La mente, aunque no es de evolución física, depende por completo de la capacidad cerebral, siendo conferida ésta, por el desarrollo puramente físico y evolutivo.”
“Tal como la evolución de la mente, depende y se demora por el desarrollo lento de las condiciones físicas, del mismo modo, el progreso espiritual, depende de la expansión mental y el retraso mental lo retarda” y en algunos casos puede llegar a anularlo completamente.
Para avanzar en la superación espiritual, es absolutamente necesario el tener una mente sana, que nos permita evaluar el bien del mal y darnos cuenta de nuestras acciones conscientes y con algo más de estudio y esfuerzo, también de nuestras reacciones inconscientes.
El legendario “Conócete a ti mismo” de Sócrates grabado en el templo de Delfos, sigue siendo la piedra angular de toda evolución, pues si estamos ciegos ante nuestros propios defectos...¿Cómo podemos mejorar? Si no descubrimos nuestros propios talentos, nuestras virtudes y clarificamos nuestros valores... ¿Cómo podemos avanzar en la vida? ¿Cómo vamos a lograr mejores resultados? ¿Cómo vamos a aportar al mundo algo verdaderamente valioso? La única manera es conocernos. Procurar conocer cuáles son nuestros defectos dominantes, procurar atrapar esa pasión desordenada que sobresale entre las demás y que es un impedimento, para avanzar con mayor efectividad en nuestra vida, como así mismo, es necesario conocer nuestras cualidades para poder potenciarlas.
Este auto análisis sería imposible de realizar si no tuviésemos un cerebro sano en donde está radicado “este mecanismo del organismo humano, que piensa, percibe y siente, el total de la experiencia consciente e inconsciente”8 porque es “la mente quien interviene constantemente entre la materia y el espíritu”9 por lo mismo “el hombre crece conscientemente, desde lo material hacia lo espiritual, por la fuerza, poder y persistencia de sus propias decisiones”
“La evolución material, te ha proveído de una máquina vital, tu cuerpo, el Padre mismo, te ha dotado de la realidad espiritual más pura conocida en el universo, como es tu Ajustador de Pensamiento, pero, en tus manos y sujeta a tu libre albedrío, se te ha dado la mente y es por ella que vives o mueres. Es dentro de la mente y con la mente, que tomas las decisiones morales que te permiten alcanzar la semejanza con Dios”
“El cerebro físico, con su sistema nervioso correspondiente, dispone de esa capacidad para responder al ministerio de la mente, tal como la mente en vías de desarrollo, dispone de cierta capacidad innata de receptividad espiritual y por tanto entraña los potenciales de progreso y logros espirituales.” y también los logros materiales como la abundancia o la buena salud ya que en verdad, somos y nos sentimos según sean nuestros pensamientos y emociones.
La mente, está compuesta de dos partes, una es la conciencia y la otra es el subconsciente. Ambas están sincronizadas y funcionan conjuntamente. Los científicos han conseguido averiguar muchas cosas acerca de la conciencia. Y, sin embargo, hace menos de cien años que empezamos a explorar el vasto territorio desconocido del subconsciente, pese a que el hombre utilizaba deliberadamente sus poderes místicos ya desde los primeros tiempos de la historia de la humanidad y pese a que incluso hoy en día los aborígenes de Australia y otras poblaciones primitivas siguen haciéndolo en gran medida.
Se supone que cualquier persona, que es capaz de pensar, es íntimamente consciente de ser consciente. Pero la conciencia es el misterio más desconcertante al que han de hacer frente la filosofía y la neurología. Algunos filósofos piensan que es algo demasiado difícil para que la inteligencia humana pueda comprenderlo.. Desafiando estos planteamientos, los investigadores han aprovechado los nuevos medios de investigación, especialmente los aparatos para escanear el cerebro y observarlo en pleno funcionamiento. Gracias a ello se ha hecho un gran avance en el conocimiento de las funciones cerebrales y la correlación entre zonas cerebrales y determinadas capacidades mentales.
Pero los seres humanos no sólo tenemos la posibilidad de contar con un cerebro inteligente y una mente consciente pues somos mucho más que eso ya que “la personalidad humana se identifica con la mente y el espíritu, vinculados en enlace funcional por la vida en un cuerpo material. Este enlace de mente y espíritu, no da como resultado una combinación de las cualidades o atributos de la mente y el espíritu, sino que más bien da un valor universal, enteramente nuevo, original y único de perduración potencialmente eterna y ella es el alma.
“El alma es una adquisición experiencial. A medida que la criatura mortal elige hacer la voluntad de Dios, el espíritu residente se vuelve parte de una nueva realidad en la experiencia humana. La mente mortal y material, es la madre de esta misma realidad que surge” El alma es inmortal en potencia, pues su sobrevivencia eterna depende totalmente de la voluntad del ser humano de hacer lo que es recto.
Como podemos ver, nuestro cerebro, esa masa que se asemeja a una nuez es el depositario de lo mejor de nosotros mismos como seres humanos ya que en él radica la mente y en ésta, nuestra alma. Nuestra misión es mantener activo nuestro cerebro dándole el uso adecuado, es decir aprendiendo a pensar, no quedándonos con las simples apariencias, porque detrás de ellas, se encuentra el verdadero significado de lo que nos ocurre y el por qué. También debemos hacernos dueños de nuestro propio destino, sabiendo tomar nuestras propias decisiones y no estar siempre a la espera, que sean otros quienes nos señalen el camino a seguir.
Debemos mantener nuestro cerebro activo y nuestra mente limpia de todo lo negativo, de esta forma podremos disfrutar plenamente de los dones que a diario recibimos y que muchas veces, no somos capaces de reconocer como tales y que su uso adecuado permite que nuestra alma esté en comunión con nuestro Ajustador, ganándose la sobrevivencia eterna.
Por Yolanda Silva Solano - Basado en el Libro de Urantia.
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