Una por una, las características realmente importantes y las que ya no justifican un gasto mayor.
Para los que buscan una notebook para navegar por Internet, ver películas, responder algunos correos electrónicos y trabajar en un documento de texto o una presentación en PowerPoint, es decir, para la gran mayoría, una guía para saber a qué cosas hay que darle importancia y cuáles se pueden pasar por alto.
1 Peso. Todo lo que pese más de 3 kilos es un dolor de cabeza … o más bien de hombros. Hay muchas notebooks que pesan mucho menos (hasta poco más de 1 kilo), por lo que no hay motivo para comprar algo más pesado.
2 P antalla. Las más chicas tienen 10 pulgadas. Pero ese es un tamaño demasiado chico. Para la mayoría, 13 pulgadas es lo ideal: suficientemente grande pero, a la vez, transportable en un bolso. Las de 15 pulgadas son un poco grandes para llevar, para no hablar de las de 17 y 18, que son enormes y, con 3,5 kilos o más.
3 Procesador. No tiene importancia. De veras. Si la notebook tiene un procesador Intel Core i3-2377M que funciona a 1,4 GHz con un caché L3 de 3MB, maravilloso. Y si no lo tiene, también es maravilloso. Para la gente común, todos los procesadores son buenos. No hay que pagar de más por un chip opcional que ofrece más velocidad.
4 Batería. La letra chica sobre la duración de la batería, suele decir: “La duración varía según la configuración del producto, el modelo del producto, las aplicaciones cargadas en el producto, la configuración de la administración de energía del producto y las funciones del producto que utilice el cliente.” En otras palabras, el manual dice muy poco, así que tenga a mano un cable.
5 Memoria. A diferencia del procesador, la RAM importa. Conviene tener 4 Gigabytes. Una notebook con menos de eso resultará lenta. Aunque encarezca, hay que comprar una con 4GB.
6 Almacenamiento. Esto solía importar pero, con la aparición de servicios de streaming y “la nube” (almacenamiento en Internet), la cantidad de espacio para guardar en la computadora es menos importante. Los documentos y otros archivos pueden quedar en Google Docs. Las fotos pueden cargarse en iCloud o Flicker. Aun para los que quieren guardar los archivos en el disco propio para que estén a mano cuando no hay conexión a Internet, los servicios como Dropbox y SkyDrive permiten seleccionar los archivos que se quieren guardar en forma local, mientras se conservan las copias en “la nube”.
Los videos son otra cosa que quizá se quiere ver cuando no se está online, pero ¿cuántos videos se necesitan almacenar? De todos modos, casi todas las notebooks de hoy tienen una capacidad de 500GB, que permite tener casi 500 horas de video de definición estándar o unas 8.300 horas de música. Una aplicación como Microsoft Office, solo por citar un ejemplo, requiere tres gigabytes.
7 Placa gráfica. Al igual que con el procesador, aquí no hace falta gastar. Para un uso normal, cualquier procesador gráfico basta.
8 Conexión inalámbrica. Algunas laptops son sólo Wi-Fi, pero otras tienen incorporados chips de celulares para que pueda conectarse a las redes 3G o 4G. Hay que comprar el modelo con sólo Wi-Fi. Si se necesita una conexión de datos por celular, se puede conectar en forma inalámbrica la notebook al smartphone y usar esa señal. O se puede comprar un MiFi, un dispositivo independiente que comparte la señal celular de datos con múltiples dispositivos al mismo tiempo.
9 D VD. La ranura que se usa para los DVD o los CD está cayendo en desuso. La música en su mayor parte viene y va por Internet y ya no utiliza medios físicos. El video al parecer seguirá sus pasos. Las aplicaciones se descargan cada vez más de tiendas online. Así que no se necesita ninguna clase de disco óptico. ¿Alguna vez será necesario? Quizá, pero probablemente será algo tan poco frecuente que conviene tener una notebook más delgada y liviana sin disco óptico y comprar un disco externo para las escasas ocasiones en que se lo necesite. Las laptops funcionan mejor y su batería dura más si no tienen que hacer girar un disco brillante y dispararle un rayo láser.
1 0 Pruébela. Antes de comprar cualquier notebook, hay que tenerla en las manos. Todas las especificaciones del mundo no le dirán si el teclado tiene las teclas muy juntas, si la pantalla no es de su gusto o si los parlantes son diminutos. Para averiguarlo, hay que ir a un local. Se puede comprar en una tienda online, que suelen ser más baratas. Pero se necesita probar la mercadería antes de entregar el dinero.
The New York Times. Especial
Por Traducción Elisa Carnelli Sam Grobart
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