A menudo cuando estamos pasando por una situación difícil, cuando estamos atrapados sin poder avanzar hacia un objetivo, o experimentamos emociones intensas, es fácil que nos centremos en el problema que nos acosa en ese momento. Esta tensión intensa también suele pasar cuando estamos preocupados estresados o deprimidos.
Si bien es importante aceptar la realidad del problema o emociones presentes, es improductivo limitar nuestra atención a lo terrible de la situación presente. Debemos aprender a dar un paso atrás para poder observar desde una perspectiva más amplia el obstáculo que se interpone nuestro camino, hacer una inspiración profunda y ver más allá del problema, porque muchas veces solemos ahogarnos en un vaso de agua.
Nos centramos tanto en el problema que dejamos de ver el panorma completo, lo que realmente importa. Debemos aprender a centrar la atención y la acción en lo que es más importante para nosotros, recordando que nuestra intención real es crear una vida mejor y más segura.
¿Lo que estas haciendo ahora cómo encaja dentro de esta intención?
¿Estás enfocando tu atención en lo que es más importante para ti, dándote mayor seguridad y autoestima?
Sé amable contigo y comienza a reconocer que tu Yo del pasado te ha traído hasta tu presente y que trae toda la sabiduría que solamente la experiencia puede aportar. Tu Yo presente es capaz de revisar y aprovechar las experiencias pasadas, sacar lo positivo de ellas y reconocer ciertos patrones para usarlos en su provecho.
Y ten muy claro que sólo tu Yo presente puede decidir si eres lo suficientemente valioso ahora, como para realizar nuevas elecciones enriquecedoras que te permitirán experimentar un futuro mejor.
Por tu excelencia,
Rosana Portelli
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