La vida nos brinda todo, lo bueno y lo malo, la salud y la enfermedad, la paciencia y la desesperación… vivir plenamente supone aprender a disfrutar de lo bueno que nos brinda la vida y a tomar con filosofía lo malo, tratando de mantener a la desarmonía lejos de nuestras vidas.
La enfermedad, por ejemplo, es un vínculo con la desarmonía y así como los vínculos pueden desbaratarse, la enfermedad también.
Una vida se enferma en la desarmonía de no saber disfrutar de lo que se ha obtenido, ni de lo que ha sido otorgado por el Universo, en estas condiciones se atrae a la enfermedad real del cuerpo y el alma, como un pedido al Universo a través de la Ley de Atracción, un pedido que ha salido de tu boca en la forma de quejas constantes y repetidas, protestas por tu vida y desacuerdos con los dones que el Universo te regaló.
De esta forma lográs lo que repetís constantemente, el Universo te ofrece lo que pedis a través de la Ley de Atracción, o sea el contenido de tus quejas, ya que el Cosmos no interpreta tu negatividad, simplemente hace tus palabras y pensamientos repetidos, tu nueva realidad.
El poder de la intención no tiene restricciones, ni controles, pudiendo poner tu intención en cualquier cosa y en cualquier dirección, para bien o para mal… y es así que podes modificar la condición de tu salud, tu cuerpo, sanar a otra persona, cambiar el rumbo de tu vida, o dirigir tu poder e intención al mundo para propender al bien común, mejorar a la sociedad y lograr el cumplimiento de tus deseos.
Es así que sabiendo emplear el poder de la intención y a través de manifestaciones conscientes de los deseos se puede lograr un manejo inteligente de la Ley de Atracción, para que ésta funcione para vos de forma positiva.
Las manifestaciones conscientes son como las afirmaciones diarias, necesitan ser repetidas para auto convencerte del cambio y así el cambio parece llegar solo, junto con las oportunidades, intuiciones y satisfacciones en la salud, el dinero, la abundancia y todo aquello de tu vida que debas y necesites cambiar, sanar, y llenar de satisfacciones.
Para que los mecanismos de la Ley de Atracción te escuchen debés aprender a crear y generar pensamientos intencionados y dirigidos, manifestando seriamente tus deseos verdaderos, reales, conscientes de su necesidad de realización, perfectamente abierto a sus consecuencias.
Utilizar las sabias herramientas que te provee el Cosmos para la sanación de tu vida enferma, es intentar ser uno con el Universo, ponerse en su armonía vital, propendiendo al cambio positivo y generando energía sanadora que puede proyectarse hacia los demás.
Practicá tus manifestaciones diarias, conscientes y creadoras de salud de la siguiente manera:
Practicá la creación consciente de tu día a día antes de levantarte de la cama.
Practicá la visualización de tus metas.
Armonizá tu interior con tus palabras comprometiéndote con esta tarea.
Utilizá el gran poder de la palabra con toda intención y atento al cambio.
Abrí tu mente y tu corazón a nuevas posibilidades.
Abrazá las coincidencias.
Generá afirmaciones y visualizaciones nuevas diariamente que refuercen tus palabras de poder.
Aceptá con filosofía cada paso del proceso y reforzá tu energía con manifestaciones conscientes.
Recordá siempre que el Universo te escucha, sólo debés armonizar tus pensamientos con tus acciones, palabras e intenciones para ser comprendido.
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